Imaginá que te levantás, tenés organizadas todas las tareas que vas a hacer en tu día y el tiempo que disponés para realizarlas. Hasta acá todo va sobre rieles.
Y de pronto… empiezan a surgir imprevistos y quizás algunas tareas que no estaban en tu plan. Entonces, te ponés manos a la obra, creyendo que igual podés con todo y cuando te das cuenta, se te fue la mitad del día.
A esa altura, ya invertiste más energía de la prevista, empezás a sentir agotamiento, y es normal, porque ya hiciste mucho más de lo que habías planificado.
Y así te das cuenta de que por más que quieras, no vas a poder terminar con todo y toca postergar las tareas que no alcanzaste a hacer, esas que sí habías planeado, quedando pendientes para mañana.
Cuando llega el momento de repasar tu día, no te sentís bien con las decisiones que tomaste, porque que tu día no fue tan productivo como querías y tener en la cabeza todo lo que quedó pendiente te hace sentir ansiedad, estrés y un poco de frustración. ¿Te pasó?
Estoy segura que sí, es algo a lo que muchas nos hemos enfrentado y que mucho tiene que ver con la manera de planificarnos que tenemos.
Y la pregunta que te hago es… ¿Es tu planificación realmente consciente?
La buena noticia es que tiene solución y esta planificación de la que te hablo, tiene como premisa una sola cosa, y es poner el foco primero en vos misma.
Antes de compartirte qué me sirvió a mi, para lograr mejorar en esta área, me encantaría que sumemos algunas distinciones que nos van a hacer más fácil el camino hacia una planificación más consciente, más amena y más conectada con nosotras.
¿Qué es la productividad personal?
Básicamente, es una forma de organizarnos y planificar nuestros días, dejando de lado expectativas poco realistas que solo nos generan frustración, agotamiento y desconexión de nosotras mismas. Y, ¿qué tiene que ver la expectativa en todo esto?
A las personas nos gusta tener todo bajo control, aunque no es algo posible, en el fondo es algo que siempre intentamos hacer.
La incertidumbre la dejamos para una fiesta sorpresa o un regalo eventual. Pero cuando se trata de trabajo y actividades diarias, lo común es querer sentir que todo está controlado y bien planificado. De lo contrario, la ansiedad y el estrés comienzan a apoderarse de nosotras y eso es algo a lo que huimos.
Esa sensación de control, está estrechamente relacionada con tus expectativas.
Y como tenemos la expectativa de controlarlo, nos organizamos en función a ello y con el propósito de alcanzar esas expectativas que tenemos.
Ahora, el ser productivas con nosotras y llevar nuestra planificación de una manera más consciente, no está ligado al control, sino que tiene que ver con tenernos en cuenta a nosotras y con ello también a nuestras emociones.
Las emociones y la productividad personal
Para tener una productividad sana es importante conectar con nuestra propia motivación, con el amor hacia lo que hacemos y en función a ello tener objetivos bien definidos.
Y por supuesto no debemos olvidarnos de factores tan importantes y reales como tiempo y energía. Eso es cuidarnos, eso es respetarnos, eso es claramente ser conscientes de nosotras y planificarnos a partir de esta conexión.
Para entender la relación de las emociones y nuestra productividad, veamos el siguiente ejemplo: Una persona que trabaja mucho centrado solo en aumentar sus ingresos, pero no tiene un motivo o un fin más allá de eso y no solo eso sino que en el afán de conseguirlo descuida no solo a su entorno, sino así mismo.
En pocas palabras, no hay un objetivo personal que conecte consigo mismo, con su propósito, con su para que y sentido de ser.
Y cuando eso pasa, nuestros objetivos se vuelven insostenibles, nos desgastan, y nuestra energía se agota fácilmente. Esto es estar desconectada de nosotras y nuestras emociones nos lo dirán..
Y rápidamente también nuestra productividad lo hará notar. No olvides que somos energía y la energía viene del Amor.
Por eso, si querés aumentar tu productividad personal, o dicho de otro modo hacer de tus días más conscientes, debes empezar a preguntarte:
- ¿Qué me motiva?
- ¿Qué quiero lograr?
- ¿Para qué quiero lograrlo?
- ¿Qué es lo que persigo realmente en mi día a día?
Esto es una gran forma de conectar con vos, poder definir tus objetivos y estar un paso más adelante y pensar tu vida a otro nivel.
Ahora, ¿qué pasa si este análisis ya lo hiciste, pero todo sigue igual?
Si esto te está pasando, te comparto algunas otras razones que pueden estar atentando contra vos y tu productividad personal.
Otras causas de la falta de productividad personal
Si no se trata de motivación y falta de objetivos claros… ¿De qué otra cosa puede tratarse?
- Procrastinación: Dejás de hacer cosas realmente importantes por otras menos significativas (Revisar el celular, ver qué hay de nuevo en las redes, etc.). De este tema hay mucho que hablar, podemos ampliarlo en otra entrada.
- Perfección: Hasta que no quede perfecto, no seguís, no avanzas.
- Distracciones: Te dejás llevar por todo tipo de interrupciones y no propicias tus momento de foco, ya sea diciendo que no, poniendo límites, haciéndote de mecanismos para mantener tu foco y también estableciendo momentos específicos de pausa y distracciones, que luego promueven que sí puedas hacer foco.
- NO saber delegar: Creés que nadie más puede hacerlo como vos, tenés muchas cosas por hacer pero no confiás en que alguien más lo puede hacer tan bien. Esto es una trampa que limita tu crecimiento.
Hasta acá, varias causas que nos permiten reconocer dónde puede estar el problema… ¡Ahora pasemos a la solución!
¿Cómo aumentar tu productividad personal?
Cada una de nosotras es única, por lo cual, cada caso va a ser distinto. Pero hay algo en común para todas que nos permite lograrlo, y es primero haciéndonos más conscientes de nosotras mismas.
Y si aplicas las siguientes recomendaciones, te aseguro vas a terminar de conectar con vos y atraer el éxito a tu día a día:
- Iniciá temprano por la mañana: Vas a tener más energías y más aún si es después de una buena noche de descanso. Suelen ser las horas más productivas del día.
- Elegí el momento apropiado para cada tarea: Realizá las tareas más pesadas primero, cuando tu energía está alta. A medida que avanzá el día, nuestra energía va descendiendo.
- Hacé una lista: Sacá de tu cabeza todo lo que tenés que hacer, bajalo a papel y organizalas en función a tus prioridades. La prioridad la determinás vos, por eso es planificación consciente. Es tu diseño, es tu vida. Si surgen tareas imprevistas, pero menos importantes, anotalas igualmente, eso va a generar sensación de más control, va a bajar tu ansiedad y hacer que puedas decidir qué y cuándo hacerlas.
- Evitá el multitasking: Resistí la tentación de hacer múltiples tareas a la vez. Creeme, no es posible y solo te hace menos efectiva y vas a tardar finalmente más de la cuenta.
- Desconectate: Como siempre les digo: Desconectar para conectar. Cuidado con la tecnología, revisar por 3 minutos una red social, se puede convertir en horas en un abrir y cerrar de ojos. Además, es súper necesario desconectar realmente, descansar de tantos estímulos que solo nos desconectan de nosotras.
- Aprendé a delegar: Siempre vas a poder contar con alguien que te pueda ayudar. Creo que este es un punto que debemos trabajar y se trata de confiar. Si no lo hacemos, terminaremos colapsando emocionalmente.
- Decí que no si es necesario: No te sobrecargués con tareas ajenas. La prioridad sos vos “Tu plan, Tu vida”. Ayudá cuando puedas, pero respetandote a vos misma primero.
Aumentar tu productividad personal es aumentar tu conexión con vos y tu bienestar. Por eso quiero que seas consciente de que “esta” depende de vos, que es un trabajo y una práctica de todos los días. Y como siempre te digo, tener una vida en conexión con nosotras, tener la vida que soñamos y deseamos para nosotras, es posible, sos capaz y lo merecés.
Hace falta creerlo para crearlo, esfuerzo, dedicación y constancia.
Mi nombre es Yamila Ponte, Life Coach. Espero sinceramente que estos consejos te ayuden a aumentar tu productividad personal, para más contenido que te acompañe en este proceso, seguime en mis redes sociales: https://www.instagram.com/ponteati/
¡Nos vemos por allá!